Inicio Cosplay & Fashion ¡Exclusiva Yakuza! Conozcan a la cosplayer venezolana Clover Leah

¡Exclusiva Yakuza! Conozcan a la cosplayer venezolana Clover Leah

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(Valera, 31 de Diciembre. Yakuza Webzine).- Su nombre es Stella Miale Santorelli, aunque es mejor conocida como Clover Leah en esos mundos del Internet y el cosplay. Esta joven de 21 años, aunque repetidamente le digan que luce de muchos menos, es probablemente la cosa más dulce en la escena venezolana y en esta nuestra tercera entrevista a cosplayers venezolanos nos comparte su experiencia y opiniones sobre esta apasionante afición.

Contrario a la opinión de nuestras otras entrevistadas, Clover si aboga por hacer trajes de personajes con los que tengas cierto parecido físico y aunque se acusa a si misma de ser “muy torpe” es una perfeccionista en su trabajo, así le lleve muchos intentos. Aunque lo que refleja es una gran ternura, al mismo tiempo puede ser muy directa, pese a su aparente timidez al inicio de la entrevista.

Del desconocimiento a los cursos de costura

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Como la enorme mayoría de los cosplayers, Stella entró en esto sin saber coser, pero la pasión por este hobby la llevó a aprender. Su primer encuentro con el cosplay vino como consecuencia de su afición al anime, que veía por televisión nacional. En 2006 asistió a la primera Convención Avalancha y por primera vez vio cosplayers. “Había gente vestida como personajes de animes que yo había visto y me dije que ‘que fino ver una persona disfrazada’”, inició.

Claro, en ese momento no conocía el término cosplay. “Era chiquita y me empezó a llamar la atención y mi primer intento de cosplay fue ir como Aerys de Final Fantasy VII”, comentó recordando que fue en ese mismo evento un día después y con ropa suya, intentando imitar el aspecto del personaje.

“Como era muy improvisado, lo saque la noche anterior porque no sabía, simplemente quería ir como el personaje porque me gustaba y ya”, agregó. El primer cosplay que vio en su vida fue uno de Lust de Full Metal Alchemist y su reacción es muy descriptiva: “Oh es Lujuria, oh por Dios que fino”.

Su primer intento oficial vino como un personaje del comic de The Crow/Razor, junto a su amiga Katherine Reyes, quien le ayudó a conseguir la ropa y luego modificarla. “Esa fue la primera vez que me puse a coser en mi vida y fue una experiencia demasiado loca, me dije ‘Oh por Dios estoy agarrándole gusto a esto’ o pensé ‘mira como hice esto y se transformó en esto y que genial’ de verdad me gustó mucho y empecé a agarrarle cariño”, recordó.

El siguiente paso fue natural, tomar cursos de costura, aprender a hacer patrones y experimentar. Así hizo su particular versión de Patamon (Digimon). Considera que cada traje, incluso los más sencillos han tenido su dificultad y su aprendizaje ha sido gradual, elevando poco a poco sus capacidades tanto como Cosmaker y obviamente como cosplayer.

Su primera experiencia con props fue con la guadaña de Maka de Soul Eater. Recordó como con la ayuda de su padre que tiene una fábrica de zapatos y conocimientos de mecánica convirtió un simple tubo de agua caliente en el arma.

“Papá, ese lindo tubo de tantos centímetros es perfecto, dámelo”, recuerda que le dijo a su progenitor quien pese a sus protestas terminó colaborando con ella. “Él no quería que yo tocara la lija, porque tengo malas experiencias con la lija. Fue muy divertido porque tiene tubos de agua caliente, tiene cartón, tiene suelas de zapato, tiene foami, tiene tubos de toallines, pintura, tiene un poco de cosas que se pueden conseguir fácil, cosas que la gente ve y dice yo no puedo hacerlo con eso porque no va a quedar bien”, narró Clover, dejando claro que es posible tener un buen resultado sin importar los materiales.

Proyectos y dificultades en el cosplay

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Luego de eso, el trabajo de Stella fue haciéndose más elaborado. Mencionó su primer sombrero, al cual llamó “un desastre, pero lo logré”. Más recientemente la hemos visto como Sakura (Card Captor Sakura) y Mickey (Kingdom Hearts), trabajos que realizó casi de manera simultánea con colaboración de un primo en el caso del arma del ratón de Disney. “He ido de lo más sencillo a lo más difícil como hacer una falda enorme, o un arma diferente”.

“Actualmente estoy trabajando en el traje de Sakura de Príncipe que usa en uno de los capítulos en una obra de teatro, pero la versión del manga porque la versión del anime no me gusta, es horrible y el del manga es más bonito. En la Princesa Mononoke también estoy trabajando y tengo planeado hacer al Young Link de Ocarina y a Anya de Code Geass para Avalancha”, comentó sobre sus próximos proyectos.

En cuanto a las dificultades para los cosmakers y cosplayers venezolanos dijo que lo principal es conseguir dinero para comprar materiales, luego hallar dichos materiales y por último sacar tiempo de las responsabilidades diarias para poder elaborar los trajes. Particularmente, dice tener que comprar siempre materiales de más. “En mi caso yo me equivoco demasiado, soy demasiado torpe y a cada rato tengo que comprar material de sobra”.

También señala un cierto deterioro en la relación entre cosplayers en el país por un tema ya abordado en otras entrevistas: la competencia.

“Yo antes veía que la gente lo hacía más por diversión y decir ‘mira, soy el personaje que fino’, que ese es el espíritu obviamente. Me parece muy bien que haya evolucionado en el sentido de que la gente ya tiene esa meta de hacerlo bien y como se debe. Obviamente todavía está la gente que no puede hacerlo totalmente como quiere, pero es muy chimbo que la gente que hace el mismo traje esté ‘Por dios, soy yo y tu cosplay no es nada’ cuando la otra persona puede tenerlo mejor que tú y hasta se puede ver mejor”, sentenció con firmeza.

Sin embargo, es menos permisiva en el tema de la apariencia. “Tienes que tener ese cierto parecido con el personaje. Por ejemplo, si tienes un personaje que tiene cierto tipo de rasgos, cierta altura, tienes que buscar que el personaje tenga parecido contigo. Por ejemplo, yo no voy a hacer un personaje que mida 1.70 yo midiendo 1.50”, dice.

Razona su opinión diciendo que esto tiene que ver con la percepción de las personas que ven al cosplayer. “Ellos no te conocen a ti, ellos te ven como el personaje (…) es mucho más placentero porque yo lo he vivido viendo a otras personas, ver a alguien haciendo un personaje de la misma altura, contextura, el rostro parecido y decir ‘oh por Dios es igualito, que genial’, eso llena mucho de satisfacción, por eso creo que uno tiene que tratar de apegarse al personaje que hace”, profundiza.

Con respecto al tema de la fama y como puede cambiar a alguien lo ve como algo negativo, pues se cierran a la crítica constructiva o los consejos o no comparten su conocimiento con otros. “Es muy chimbo que no aceptes ese tipo de cosas porque la mayoría de la gente no te lo dice por maldad, que lo ve y que tu no lo ves porque lo hiciste tú. Cuando estás tan cerca de eso no lo sabes tan bien que como una tercera persona lo ve”.

“En cuanto a la fama yo soy muy distraída con eso, no tengo la menor idea si soy conocida o no y realmente no me importa”, dice aclarando que si bien tiene un DeviantArt y un Fanpage en Facebook, su objetivo es simplemente compartir su trabajo del mismo modo en que ella aprecia el trabajo de otros. “Aquí hay mucha gente que es muy buena haciendo cosplay, excelente. Yo creo que esas personas son maravillosas y son muchísimos, cuando los veo me emociono”, dice Clover, quien paradójicamente cree que si fuera muy conocida no podría ser ella misma en público. “Soy una persona muy directa y sincera si yo lo pienso te lo digo”.

«Admiro a muchísimos, en Venezuela hay muchísima gente talentosa, muchísima. También hay gente que simplemente las veo, no las conozco, no las tengo pero que trajes tan geniales. Podría decirte algunos pero no todos», agrega volviendo al tema de la calidad del cosplay en el país.

Las aficiones y la vida real

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Como todos, Stella se considera una aficionada al mundo de donde se origina el cosplay, el anime, los videojuegos, etc. “Mis primeros juegos fueron los de NES, mis primeros animes fueron Sailor Moon, Samurai X y Pokemon, Dragon Ball Z y ese tipo de cosas. Cuando entre a sexto y séptimo ya había Internet en mi lindo cuarto y había un lindo canal llamado Youtube y un lindo buscador llamado Google. Empecé a ver los dibujos y dije ‘estas son las series que yo veo’ y me di cuenta que se llamaba anime y empecé a buscar más y más y más”, dijo sobre sus inicios.

“También fui buscando videojuegos y así llegue al cosplay y el estilo de vestir Lolita”, apuntó.

Dice que su saga de juegos favoritos es la Leyenda de Zelda, lo que le ha generado un amor por los elfos tremendo. Sin embargo, prefiere llamarse friki que otaku, pues recuerda la connotación sumamente negativa del término en Japón. “Me gusta de todo un poco. De lo que veo, veo cosas muy específicas. Tengo que ver una cosa con una trama muy buena para verla, si es esas tramas de ahora que todo es muy color de rosas y vamos a hacerlo todo incoherente o que no lleva a nada especifico”, dijo sobre sus preferencias.

Con respecto a la opinión de sus familiares, dice que su padre odia que haga cosplay y que preferiría que dedique su talento en la costura a hacer ropa. Su madre en cambio, si bien empezó con un cierto temor por desconocimiento, eventualmente lo ha aceptado, no obstante le sigue pareciendo algo raro. “Hace poco mi mamá tuvo la oportunidad de verme de cosplay y me dijo que me veía rara ‘mamá pero sabes que me veo linda’ y ella ‘no, te ves rara. Echa para allá’”, dijo entre risas.

Todo eso de salir de cosplay también le ha generado una serie de anécdotas graciosas, pues cada vez que hace un grupal duerme donde una amiga y luego todas juntas llegan en un carro a donde sea el evento de turno ¿Cómo es el viaje? Escuchando la banda sonora del anime o serie en cuestión de la que vayan vestidas. Stella es estudiante de Diseño Gráfico Publicitario en su último semestre y próxima a presentar su trabajo de grado. Vive con sus padres y su hermana. Su novio se ha vuelto aficionado a su trabajo y la apoya totalmente y lo decimos de nuevo así le moleste: es una ternura. Con ella cerramos 2013 y el próximo martes tendremos al primer hombre cosplayer/Cosmaker de nuestro ciclo de entrevistas.

Por Sensei Agot (@senseiagot)
Fotos:
SKV Studios, Photografer, Caracas Freemind, DeviantArt de Stella y Yakuza Webzine.

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