Inicio TV Shadowhunters: Desglose y crítica objetiva sobre la temporada
TV

Shadowhunters: Desglose y crítica objetiva sobre la temporada

30 minuto leer
1
0

(Caracas, 06 de abril, Yakuza Webzine) Shadowhunters terminó anoche su primera temporada, y a pesar de que quiero mantenerme optimista, también tengo cientos de cosas para criticar al respecto.

Soy una fan enardecida. Me encantan los libros, podría decirse que es una de mis sagas preferidas, y lo que le hicieron al material base en la serie fue bastante… frustrante, por no decir algo más fuerte. El artículo será largo porque necesito establecer casi todo lo que me molestó, y no puedo pasarles por encima a tantos detalles, así que prepárense.

Quiero repetir lo que he dicho en todos mis otros artículos de Shadowhunters en la webzine: quiero permanecer optimista, quiero que me guste la serie, pero no puedo ignorar ciegamente fallas argumentales o inventos innecesarios que crean agujeros negros para la historia imposibles de resolver. Si solo me transformo en alguien complaciente y sigo sin criticar lo que no me gusta, ¿cómo puedo esperar que algo mejore, o cambie? No puedo. Así que, sin más preámbulos… Vamos a ello.

Fallas argumentales graves

Las Runas: El libro gris existe por una razón importante y definitiva, documentar las runas existentes. La mayoría de los fanáticos de la historia saben que no se pueden crear runas nuevas, exceptuando a Clary, cuyo poder es exactamente eso, pero se le restringe su creatividad por el hecho de que hay reglas, punto.

El mayor fallo argumental que encontré en Shadowhunters es la runa que definitivamente no existe en los libros, de cambiar tu aspecto físico para hacerte pasar por cualquier Cazador de Sombras. Es el mayor agujero negro que pudieron crear para sí mismos, porque cualquier persona que tenga poderes angelicales puede hacerse pasar por quien quiera. Por supuesto que se aprovecharon de esto para usarlo con Valentine y “Michael Wayland”, y no sorprendieron a nadie por haber presentado esta habilidad tres o cuatro episodios antes; pero en esto cavaron su tumba porque no contestaron preguntas básicas, como…

¿Entonces Valentine crió a Jace disfrazado todo este tiempo? ¿Esa runa es permanente o tiene que re-aplicarse? ¿Valentine sabía que Jace y Clary venían, así que se aplicó la runa y se escondió en el casillero? ¿Cómo sabía si los portales no hacen ruido? ¿Meliorn estaba trabajando para Valentine y les avisó de su llegada? Venían de una dimensión desconocida, no tiene sentido que estuviera alertado de su presencia en su base. Y de ahí salen mil interrogantes más, pero no pretendo extenderme.

Los únicos con poderes para cambiar de aspecto son los demonios cambia-formas y Tessa Gray. Esto no tiene el más mínimo sentido.

Camille Belcourt: La historia de Camille en esta temporada fue descartable en su totalidad. Si ya habían pensado en incluir a Ragnor Fell, que sale en el tercer libro y es el responsable de que Jocelyn esté dormida, podían quedarse simplemente con su trama y hacer que él tuviera el libro blanco. Camille no sirve ningún propósito en esta historia, por lo menos no hasta el cuarto libro cuando comienza a generar problemas para Magnus y Alec.

Parabatai: ¿Cómo es posible que ni siquiera nos expliquen de qué se trata ser parabatai si pretenden usarlo como explicación para todos los problemas en la relación de Jace y Alec? ¿Por qué se pasan por encima el hecho de que los parabatai no pueden tener relaciones románticas y muestran el crush de Alec con Jace como si fuera lo más romántico del mundo? ¿Por qué no explican las leyes de los parabatai un momento para que se entienda su importancia? No, es preferible lanzar la palabra al aire sin explicarla. Bien. Además, esas peleas que tienen Jace y Alec están super fuera de personalidad para ambos y las vi bastante inútiles y sin sentido.

Universos alternos: No tengo mucho para decir con este asunto de los universos alternos, pero, ¿en serio se volvieron tan locos que abrieron la posibilidad? Como si el universo de Cassandra Clare no fuera lo suficientemente grande como para tener suficiente tela para cortar. (Por más divertido que me haya parecido el universo alterno, que lo pueden ver en el clip que dejé más arriba… no tiene sentido de existir y punto)

La serie no tiene sentido: Estoy tratando de prestarle toda la atención posible a la serie, a la trama, a las cosas que presentan para obligarme a mí misma a decir que la serie tiene sentido. Pero no es cierto. Este universo que están creando en Shadowhunters no está bien argumentado, no está bien planeado. Si a los escritores les importara la historia de la misma manera que  les importa obligarnos a tolerar las ships, la serie tuviera sentido. Conocemos el libro, sabemos la base de la historia, pero hay cientos de argumentos que simplemente están mal explicados. Me encantaría poder sentar a un amigo o a un conocido y decirle, «ve la serie, es divertida» ¡Pero se me hace imposible! La serie está tan mal explicada que absolutamente nada tiene sentido. Tendrían que ver los benditos capítulos conmigo para yo sentarme a explicarles las ridiculeces que se inventan basándome en el libro y refutándolos, pero es que hasta ya me da fastidio decirlo… Las fantasías dependen de las reglas. Si ellos rompen, doblan, cambian y hacen lo que les dé la gana con las reglas, ¿qué hace que la historia sea interesante? La historia no tiene ninguna base para poder explicar por qué pasan las cosas. Primero deben establecer eso para que la serie tenga coherencia y cohesión. Por ahora, pues no lo tiene.

Fallas generales desagradables

Usar los ships como manipulación para ver la serie.

Dominic Sherwood (Jace) y Katherine McNamara (Clary) tuvieron una química bastante normal desde un principio, pero cuando forzaron la relación para que el primer beso se sintiera innecesario y exagerado, ya dibujamos la línea entre lo obligado y lo natural. Se nota que los escritores están forzando estas escenas para que los fans de las ships, que realmente es lo de menos en esta historia, vean la serie y no les importe nada más.

El caso de Magnus y Alec me da un poco más de rabia. Magnus actúa como un adolescente enamorado la mayoría del tiempo que está con Alec, y lo manipula con algunos diálogos para hacerlo sentir como si estuviera en una relación con él, cuando Alec siempre lo ha rechazado. Sí, fue bonito las primeras dos veces, y ciertamente el primer diálogo que tienen entre ellos es jocoso y divertido, pero cuando Magnus se da más importancia de la que tiene llega un punto en que se siente medio acosador.

Magnus es un ser que ha vivido por más de 300 años y le han roto el corazón dos veces. Él respeta las leyes mundanas (aunque las doble un poco) y las de los cazadores de sombras por igual, aunque no las apruebe. Es una persona sabia y madura que está consciente de las limitaciones de Alec para entablar una relación, primeramente, homosexual, y como segundo, con un brujo; un subterráneo, básicamente los enemigos de los Cazadores de Sombras. Magnus le da tiempo a Alec, respeta sus decisiones y su espacio porque lo quiere.

La relación de Magnus y Alec no es ni agradable ni divertida de ver cuando conozco las circunstancias que los rodean en los libros y sé cómo cada uno lidia con su atracción desde un principio, porque es más complicado de lo que Magnus en Shadowhunters hace ver. Y me hubiese gustado que su relación evolucionara de forma más orgánica y no tan forzosa. Por más que Matthew (Alec) y Harry (Magnus) me encanten como pareja en la serie –y el beso me haya fascinado, no por las circunstancias, sino porque se sintió real-, Magnus está muy distante de lo que realmente es su personaje, y es una verdadera lástima. (Y ni contar con que el bendito episodio se llama Malec. ¡MALEC! Es un Fanon name para el ship de Magnus y Alec, vaya… qué inteligentes. ¿Me pregunto qué pasará en el capítulo llamado Malec? ¡No se pregunte más! Aquí les dejo el video.)

Las actuaciones disminuyen en calidad.

Dominic Sherwood necesita clases de actuación urgentes, sobre todo para evitar cambiar la voz cuando cambia de acento. Jace no habla así, ni tampoco parece tan tenso y estresado todo el tiempo. Katherine McNamara no está mal, como tal, pero necesita trabajo y entender la personalidad de Clary mejor. Harry Shum Jr… por más que lo adore, su Magnus está muy mal. Es un inmaduro, un niño caprichoso que está haciendo un berrinche constante porque Alec no le presta atención y eso me saca de quicio. Sus manerismos están bien, y hay veces que siento que veo a Magnus, pero su personalidad no puede ser más distinta que el Magnus de los libros, y ese Magnus sin duda me gusta más. Pudo haberlo hecho bien sus dos primeras escenas, pero cuando comenzó a acosar a Alec, empezó a molestarme.

Isaiah Mustafa (Luke) sigue siendo malo. No mejoró nunca a pesar de que le di múltiples beneficios de la duda solo porque el trabajo de los escritores fue espantoso, pero de verdad no me creo sus diálogos. Tiene que bajarle dos a la seriedad y tratar de ser más natural, pareciera que estuviera leyendo el libreto todo el tiempo.

Efectos especiales mediocres para una serie de fantasía

Los efectos especiales siguen siendo nefastos… ojalá nos den más presupuesto para la temporada que viene, porque me puedo volver loca si los vuelvo a ver prendiendo y apagando las runas cual pantalla de Smartphone, sin contar, por supuesto, a los demonios humanoides de teatro barato. Los demonios tienen que verse más reales, sin importar su especie, y con actores haciéndose pasar por demonios no se logra en lo absoluto lo que quieren.

Clary se cree la gran cosa cuando es una Cazadora de Sombras sin entrenar

¡Amiga, siéntate y ubícate un segundo! ¿Qué es eso de meterle un puñetazo a una vampiro que tiene más de 200 años? ¿Qué es eso de que tú también puedes matar a Valentine? ¿Qué te pasa? ¿Quién te crees? Apenas entrenaste un par de veces con Alec, ¿y ya te crees la próxima Jonathan Shadowhunter? ¡No! ¡No, no, no! La Clary de los libros comienza a entrenar con Jace a partir del tercero, y luego de ese libro es que Clary logra más o menos entender las bases de la cacería y cómo matar demonios. Sí, es útil con lo de las runas, pero Clary no tiene habilidades para pelear, y no me puedo creer eso de su personaje en estas circunstancias, cuando apenas lleva un par de semanas conociendo a los demás y habiéndose enterado de sus poderes.

Ahora, creo que ya desglosamos lo suficiente de lo malo de Shadowhunters. Es momento de resaltar las cosas buenas, que no son muchas, pero hay.

Lo positivo de Shadowhunters

Lo rescatable de verdad en esta serie, siguen siendo los mismos actores que mencioné en los otros artículos: Alberto Rosende (Simon), Emeraude Toubia (Isabelle) y Matthew Daddario (Alec). También quiero aplaudir a algunos extras, como el actor de Rafael Santiago, el de Meliorn (que a pesar de que no se parece a su personaje hace un buen trabajo interpretándolo), Maryse Lightwood, Lydia Branwell, Robert Lightwood, y sobre todo al fenomenal Alex Van Sprang, cuyo trabajo como Valentine es impecable. Cuando está en una habitación con sus compañeros pareciera que la calidad actoral aumentara.

Lo otro, es que los actores son personas muy dulces. Son chicos muy simpáticos que se merecen tener trabajo. El problema es que el hecho de que sean lindos y simpáticos no equivale a que sean buenos actores o mágicamente mejora el libreto de la serie. Sí, se merecen trabajo, sí, son muy dulces, pero muchos tienen que mejorar sus actuaciones y estudiar mejor sus personajes. Sin embargo, como dije anteriormente, tengo esperanzas, porque en algunos episodios las actuaciones se sentían realistas y bien entregadas. Espero que se mantenga así durante la temporada dos y no sea una montaña rusa de actuaciones mediocres y buenas al mismo tiempo.

Además, la serie tiene un OST fabuloso. La música de Ruelle es la más prominente en la serie, siendo la que se usa tanto para los créditos de apertura como para la mayoría de las escenas importantes. La música está muy bien armada y ayuda a elevar las escenas, sin duda. (Dejaré una de las canciones del piloto por acá)

https://youtu.be/_hdgseiH1o4?list=PLjSc0ypkuYL9Zi-7GPJAc-QqCgWsqPPRi

Hubo capítulos buenos, por supuesto unos más que otros, pero en particular aplaudo el episodio cinco y ocho, que fueron de los mejores que pudo ofrecer la serie. También a veces el humor lograba aligerar la carga de una serie tan mal armada. Magnus tiene excelentes líneas de humor, igual que Alec, que pareciera ser lo mejor que va a salir de esta serie. Alec nunca ha sido mi personaje favorito de la historia a pesar de ser parte de uno de mis OTP principales, pero el Alec de Shadowhunters lo elevó en mi lista a probablemente mi personaje favorito (después de Simon. Nadie puede llegarle a Simon, lo siento).

¡El beso de Malec! El beso de Malec fue algo muy positivo, a pesar de que Magnus nunca sacaría a Alec forzosamente del clóset frente a toda su familia y las circunstancias hayan sido sumamente incómodas; Matthew y Harry se han pegado uno de los mejores besos que he visto en la televisión en mucho tiempo. Sigan así, muchachos.

La relación de Simon con la mayoría de los personajes se siente genuina. Alberto tiene muy buena química con sus compañeros sin duda. Su relación con Clary se siente honesta e interesante, igual que su amistad y confianza con Luke. La rivalidad con Jace es palpable, y su incomodidad adorable con el resto de los Cazadores es muy tierna. Además, otra relación que comencé a apreciar desde un capítulo en específico, fue la de Clary y Alec. Los diálogos entre ellos se sentían muy bien y la comunicación entre los actores con sus líneas se entregaba con honestidad. Kat y Matt tienen muy buena química, sin duda.

Agradezco el esfuerzo de los escritores y productores de darle una oportunidad a la serie, pero creo que es primordial para ellos escuchar a los fanáticos a este punto, y no a los que ciegamente están tirándole flores a la historia sin conocer el material original. No, no es un problema de quienes lean el libro o no, es un problema de discordancia total. No tengo problemas en que creen su propia mitología, pero hay que darle sentido. No tengo problemas en que creen sus reglas, con tal de que no solo las cumplan, sino que también sean coherentes.

Finalmente, me alegra mucho que Shadowhunters tenga una segunda temporada, porque eso quiere decir que habrá oportunidades de mejorar. Tienen el descanso que les toca para escuchar la opinión del público y realmente tomar las críticas, internalizarlas, y crear algo positivo de ellas. Tengo esperanzas, porque sé que las cosas pueden mejorar. Sin embargo, no me confío, y siento que en este aspecto me quedaré caminando sobre vidrios rotos hasta que vea la mejora.

Me disculpo por la longitud del artículo y le agradezco a todo el que se haya dedicado a leerlo en su totalidad; esta saga significa mucho para mí y necesito que Shadowhunters al menos le haga justicia. Ahora solo es cuestión de esperar a ver qué hacen para la temporada que viene. Cruzaré los dedos.

Por VickyFleitas. Imágenes cortesía de la página oficial de Shadowhunters en Facebook.

Cargue Artículos Más Relacionados
Cargue Más Por VickyFleitas
Cargue Más En TV

Mira además

El 30 Manga Barcelona nos impacta con su cartel oficial

El 18 de septiembre se presentó el cartel oficial de la edición número 30 de Manga Barcelo…