TV Game of Thrones 6×03 Oathbreaker: Tu guardia ha terminado Por Amilcar Trejo Mosquera Publicado en 13/05/2016 8 minuto leer 0 0 (Madrid, 13 de Mayo. Yakuza Webzine).- Puede que sea un poco tarde, pero no podíamos dejar pasar esta reseñal. Oathbreaker, el tercer episodio de la sexta temporada de Game of Thrones, da un primer paso hacia territorio desconocido y sienta las bases de una revelación que todos esperamos. Primero evaluaré el episodios para los no lectores de los libros de A Song of Ice and Fire, además de para aquellos que aún no ven el episodio. Luego entraremos en el terreno de las teorías. Oathbreaker es un episodio que traza un paralelismo entre dos personajes vitales en la historia, Jon Snow y Daenerys Targaryen. Uno se encuentra ante el problema de aceptar las consecuencias de sus actos y cumplir un amargo deber y la otra está recordando una vez más, que ninguno de sus títulos puede protegerle en un mundo hostil y siendo una vez más consciente de su propia debilidad. Otro personaje a quien la consciencia de su debilidad le está haciendo madurar es a Arya Stark, quien tiene un pequeño espacio en este episodio, mientras continúa su formación en Braavos. Mientras, en King’s Landing, Cersei y Jaime Lannister buscan retomar el control del poder para enfrentar a los militantes del High Sparrow… hasta ahora con poco éxito. Por otra parte, en Oathbreaker seguimos viendo el entrenamiento de Bran Stark en el uso de sus poderes a cargo de «Cuervo de los Tres Ojos». Es evidente que las habilidades de Brandon serán vitales en la inevitable confrontación contra fuerzas sobrenaturales, pero de momento, su rol es simplemente ofrecernos un vistazo al pasado que hace las delicias de muchos lectores de los libros… y reabre un debate casi tan viejo como los libros de George R.R. Martin. Mientras, en Winterfell nos encontramos de nuevo con Ramsay, quien junto al joven Lord Karstark recibe al nuevo Lord Umber. Este, aunque no pretende servir de buena gana al nuevo Guardián del Norte, no duda en asociarse a él y como muestra de paz le trae un regalo al parricida Bolton: Rickon Stark. En general este episodio no estuvo tan lleno de emociones como los dos anteriores, pero sirvió para responder preguntas y a su ver formular muchas otras, porque el verdadero valor de Oathbreaker está en lo que no dice, pero insinúa poderosamente. Jon Snow, el hombre que rompió sus votos Es evidente que el título del episodio se refiere a Jon Snow, cuya vuelta a la vida se lleva un gran trozo del episodio. Pero no es solo en sus escenas donde Jon es relevante. En las de Bran también lo es. Desde que inició la temporada, el entrenamiento de Bran ha servido para conocer la verdad. Una verdad largamente especulada por los fans y que ataría los destinos del Hielo y el Fuego. Si, me refiero a la teoría casi canónica de «R+L=J». En el tercer episodio vimos a Bran observar con sus poderes el momento en que su padre, Eddard Stark, «derrotó» al legendario Guardia del Rey, «La Espada del Alba», Ser Arthur Dayne. El joven Lord Stark enfrenta a los dos guardias del Rey con un grupo de varios soldados. Dayne elimina a todos y cuando Ned es acorralado, Howland Reed, cuyos hijos ayudaron a Bran a escapar de Winterfell, le salva. El escenario de esta lucha, cuya coreografía es increíble, es la Tower of Joy. Luego vemos a Ned entrar al lugar, pero no nos más. Una decisión inteligente, porque lo que se nos revelará allí, abre el camino para atar los cabos de la serie y llevarnos en ruta a su momento culminante. Del mismo modo, la decisión final de Jon hace lo propio, siempre las bases para el futuro. En vida, Lord Snow violó su juramento a la Guardia Nocturna al relacionarse con Ygritte. También lo violó, ante los ojos de algunos de sus hermanos, por permitir el paso de los salvajes a través de las puertas de Castle Black. Sin embargo, con su muerte, Jon quedó liberado de su juramento y libre para hacer lo que piensa que es correcto ¿Que es lo correcto? Liberar el norte y unificarlo ante la amenaza real que viene desde más allá del muro. No puede seguir siendo el Lord Comandante, ahora debe ser Jon… Stark. El show se encamina a una nueva guerra en la Bahia de los Esclavos, una disputa de poder en King’s Landing y en las Islas de Hierro. Sin olvidar a Dorne, la región peor representada en la serie. ¿Pero lo mejor? Una batalla de «bastardos» por el futuro del Norte.