Super Lovers 2 retomó justo donde nos dejaron

(Madrid, 25 de enero, Yakuza Webzine).- La espera terminó, y la segunda temporada de Super Lovers comienza justamente donde nos quedamos en la temporada anterior. A pesar de que el manga sigue avanzando – aunque poco a poco – el animé continúa su curso lento y tortuoso por las peripecias de Ren y Haru y los problemas de su relación, y el contratiempo de tener a su madre en casa.

Ren crece como la mala hierva, y si no, pregúntenle a Haru. Finalmente alcanzamos el arco en la historia donde Ren se pone exigente, y comienzan las dudas inevitables de la adolescencia: ¿Haru quiere en él un amante, o a su hermano pequeño de vuelta? Además, la presencia de mamá Haruko en casa hace que la percepción de necesidad en la vida mutua se nuble un poco y se creen malentendidos un tanto incómodos que pueden llevar a momentos muy bajos en su relación. Y por si fuera poco, otro miembro de la familia se verá afectado por la presencia de Haruko en casa. Aki, quien ha resentido a Haruko desde el accidente de su hermano mayor, será otro factor importante en el conflicto del primer arco de historia de esta primera parte de la temporada.

El manga de Super Lovers de Miyuki Abe lidia con la complicada relación de estos dos hermanos adoptivos que inevitablemente se ven atraídos de forma mutua sin una justificación más palpable que una necesidad de afecto mutua. El animé tuvo una primera temporada tan exitosa que le agregó un OVA al repertorio extra de la animación, y se confirmó tempranamente que saldría una segunda temporada.

Sin embargo, por la temática de esta segunda temporada, no queda más que esperar para ver si tal vez renuevan la serie para una tercera, pero conociendo a Kadokawa y sus malas decisiones… pues ya veremos. Si no, pregúntenle a quienes seguimos esperando por tercera temporada de Sekaiichi Hatsukoi.

En fin, retomando el tema de esta segunda temporada de Super Lovers, este arco de historia digamos que sería el más complicado de contar. Ren comienza a tener demandas físicas de Haru, al propio estilo de un adolescente insaciable, y a su vez Haru se ve moralmente atrapado entre la espada y la pared, porque por más que Ren se comporte como un adulto, sigue siendo no solo un menor de edad, sino además también es su querido y adorado hermanito. La falta de comunicación entre estos dos se vuelve bastante épica y los malentendidos siguen agregándole drama a una ya complicada historia.

Pronto veremos la adición al repertorio de personajes al problemático Natsu, junto con la mayor prominencia del personaje del enfermero de la escuela, Shirou Takamura. Por los momentos van dos episodios estrenados, así que hay que tener paciencia mientras la historia avanza, porque este manga es reconocido por una cosa: ir bastante lento.

En los aspectos técnicos tenemos la misma calidad de animación de la temporada anterior, a pesar de que he sentido en lo último que he visto que quizás quieren ahorrar costos en las tomas lejanas no dibujando facciones muy detalladas, pero supongo que mientras no me salgan con animación caricaturezca al puro estilo Orange o Yuri on Ice, vamos bien.

Finalmente, sobre los temas de apertura y cierre no tengo mucho qué decir, están entretenidos pero no cambiarán la vida de nadie.

¿Y a ustedes, qué les pareció la nueva temporada de Super Lovers? Dejen sus comentarios más abajo y esperemos que la temporada tenga una buena recepción, ya que el próximo arco puede llegar a ser el salto de 16 a 18 años de nuestro querido Ren.