Emotion, el disco infravalorado de Carly Rae Jepsen

(Caracas, 23 de Marzo, Yakuza Webzine) ¿Cuál es la fórmula del fracaso para un buen disco? Que salga junto con otros discos del mismo género, y a pesar de sus buenas críticas, quede en el olvido por su falta de exposición y promoción inadecuada. Esto fue lo que ocasionó que uno de los mejores discos del año 2015, Emotion, de Carly Rae Jepsen, pasara bajo el radar de los fans de la música pop en general.

Carly Rae Jepsen está detrás de uno de los éxitos pops más pegajosos en la historia, Call me Maybe, y el disco que le siguió a este monstruo de canción, era altamente anticipado. El problema es que la disquera no hizo el suficiente esfuerzo para promoverlo, y contra 1989 de Taylor Swift, Carly Rae Jepsen, desgraciadamente no tuvo vida.

Emotion, (estilizado como E•MO•TION), salió el 21 de agosto del 2015, y fue el intento de la cantante de hacer la transición desde el “pop puro”, como su disco Kiss, a un pop menos rosa y más inspirado en estilos alternativos y unas gotas de los 80s.

Sin embargo,  el disco fue un éxito rotundo en Japón, habiendo sido lanzado dos meses antes que en USA, debutando como número ocho y vendiendo 12.189 copias físicas. Al disco lo precedió la salida del single principal, I Really Like You, cuyo video musical puede alegrar hasta el más frío de los corazones, puesto que lo protagoniza nada más y nada menos que el simpático – y adorable – Tom Hanks.

El segundo single sería Run Away With Me, con un video ambientado en Japón y capitales importantes del mundo, seguido por Your Type.

Los productores del disco incluyen nombres como Scott Braun (Representante de Justin Bieber), Justin Bieber como productor ejecutivo, Mattman & Robin (All You Had to Do Was Stay de Taylor Swift, Love Me Like You Do de Ellie Goulding, entre otros), Shellback (Bad Blood de Taylor Swift, F*cking Perfect, de P!nk, entre otros)  y Peter Svensson (Focus de Ariana Grande, Can’t Feel My Face de The Weeknd, entre otros), por nombrar algunos.

El disco, en sí, es increíble. Es ese tipo de discos que no puedes evitar que te robe una sonrisa. Cuando escuchas la primera canción, Run Away With Me, quieres dedicársela a tus amigos, a tu pareja, y escucharla en el auto con las ventanas abajo. La melodía de las canciones hace de sus coros pegajosos y bien elaborados, este disco es como una máquina bien engrasada; no se traba, no se cansa, no tose. Todo fluye como debería ser.

Estas canciones son diferentes de Call Me Maybe porque el primer éxito de Carly tenía una historia que contar, y en este caso, estas canciones no son un libro, son para escucharlas y disfrutarlas. Las letras son evocativas, pero a la vez son lo suficientemente generales como para que cualquiera se relacione a ellas. Emotion es comparable en su estilo a 1989 de Taylor Swift, es un regalo de la música pop. Se nota que se hizo con cariño, que ambas artistas se la pensaron demasiado bien antes de colocar las canciones en orden, y que el disco fluyera de la forma fantástica en que lo hace.

Personalmente le daré un 9.5 de 10, y no le doy el 10 porque soy una necia a la que no le gustan mucho las baladas románticas y este disco tiene al menos unas tres.

Bien, sin más habladuría, les dejaré unas  canciones del disco para que las escuchen y me den su opinión. Mi canción favorita es la homónima al disco por su ritmo y melodía, los sintetizadores me hacen sentir la canción y cantarla con ganas. ¡Dejen sus comentarios sobre el disco más abajo!