(Madrid, 21 de Octubre. Okuroku).- ¿Pueden creer que han pasado 20 años desde el estreno de One Piece? Escribiendo esta nota no puedo evitar sorprenderme al pensar que este anime tiene en emisión más de la mitad de mi vida.

Pese a que dejé de ver el anime, nunca he parado de leer el manga. One Piece es una parte integral de mi experiencia en el mundo del manganime, y por eso no puedo pasar por alto el hecho de que ayer, 20 de Octubre, se cumplieron 20 años del estreno de su primer episodio.

Mucho ha cambiado en la industria en los 20 años de One Piece. Que se produzca un anime de manera ininterrumpida por tanto tiempo es algo cada vez más raro. En la era de las series de una sola temporada de 12 episodios, un anime de 907 y contando es una excepción.

Ver One Piece requiere un compromiso de vida difícilmente sostenible en el mundo en que vivimos, donde abunda el contenido. Sin embargo, la serie basada en la obra de Eiichiro Oda mantiene la atención de sus fans en Japón, estando siempre entre los anime más vistos.

Es algo sencillamente admirable, en especial considerando las muchas y muy validas criticas al anime.

Criticas al anime de One Piece

  • Animación Mediocre: No es un secreto que la animación de One Piece deja mucho que desear, como la mayoría de las series de larga data de Toei Animation. Las razón principal no es el presupuesto, sino el poco tiempo y personal del que dispone la producción para cumplir con los plazos. Todo esto ocurre por la negativa de Toei a pausar la emisión de capítulos como se hace con Boku no Hero Academia, otra serie de Shonen Jump, pero que se toma pausas. Teniendo así más tiempo para producir animación de calidad.
  • Ritmo lento: Este problema está muy vinculado con el anterior. La serie avanza a un ritmo abrumadoramente lento, como estrategia para en lo posible no igualarse al manga. Esto es un problema porque desde hace años One Piece se ha prácticamente equiparado a la historia del manga, obligando a ralentizar los acontecimientos de la historia o introducir…
  • Relleno: Como tantas otras series largas, One Piece ha tenido que recurrir al relleno en no pocas ocasiones, incluyendo una de las peores formas de hacerlo, su inclusión en medio de un arco argumental. El relleno suele ser un problema siempre, en especial si la calidad es cuestionable, pero si se hace entre arcos el daño es menor. Cuando se introduce en medio de un arco puede incluso destruir la tensión dramática de la historia.

One Piece, un anime histórico

Pero ese a esos defectos y a que sinceramente no creo que vuelva a ver el anime de One Piece, no puedo dejar de reconocerlo como un anime histórico. Su popularidad sostenida en el tiempo debe ser reconocida, en especial porque aún le quedan años por delante. En menos de 2 años pasará la barrera de los 1000 episodios, algo que hasta ahora solo han logrado 15 series (aunque el puesto 16 será para Detective Conan, que debería cruzar la marca antes).

Sin embargo, si me lo preguntan a mi, One Piece es para leerlo, no para ver el anime. Eiichiro Oda es un mangaka increíble y en sus 22 años trabajando en esta obra ha mantenido un nivel de calidad consistente. Si bien algunos arcos han sido un poco más largos de lo necesario, su maestría para el foreshadowing y su inagotable imaginación, justifican de sobra el hecho de que su obra sea el manga más exitoso de la historia… y su adaptación al anime una que lleva 20 años y va camino de los 1000 episodios.

¡Felices 20 años One Piece!

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