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GoT S7E5: Eastwatch, el episodio “menos acontecido”

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Game of Thrones Eastwatch Review The Magnificent Seven

(Madrid, 18 de Agosto. Yakuza Webzine).- Quizás Eastwatch, el quinto episodio de la séptima temporada de Game of Thrones, fue más tranquilo. O no. A falta de dos más, nos preparamos para un final trepidante.

Y todo empieza en este episodio. Quizás no hubo tantas escenas de batalla épicas, pero si que hubo la pista más importante de cara al futuro. No solo en esta temporada, sino en la siguiente.

Es hora de los spoilers, así que mejor que huyan si aun no lo han visto…

Todo empezó donde nos quedamos la semana pasada, con Daenerys y Drogon acabando con los Lannister y Tarly. Antes vimos como Jaime y Bronn salvaron el pellejo al saltar al río. Ahora deben enfrentarse a otra bestia, Cersei, a la que tendrán que dar las malas noticias.

Ante la opción de arrodillarse y jurar lealtad a La Madre de Dragones, algunos soldados Lannister y Tarly aceptan sin condiciones. Otros requieren un empujoncito ¿O rugido? Pero el padre y hermano de Sam, Randyll y Rickon se rehúsan. Y pagan el precio definitivo.

Dany sigue recurriendo al fuego y la sangre, como dice el mote de su familia, mientras Tyrion hace esfuerzos por conseguir que sea más compasiva.

Pistas en el cara a cara de Drogon y Jon

Luego de esto llegó uno de los grandes momentos de Eastwatch. Drogon aterrizó en Dragonstone frente al sorprendido Jon Snow y su eterna cara de preocupación. ¿Qué siguió? La interacción que suele ocurrir entre un perro enorme y el valiente que se acerca a que le huela la mano para poder acariciarlo.

Si, Jon Snow acarició a Drogon para sorpresa de la audiencia y en especial de Daenerys Targaryen. Si, Tyrion liberó a Viseryon y Rhaegal en Mereen ¿Pero acariciar a Drogon? Eso solo tiene una explicación y ya llegaremos a ella.

Lo que sigue es una nueva conversación entre los dos soberanos. Las chispas vuelven a saltar, pero en ese momento llega Jorah Mormont para interrumpir… y ponerse a las órdenes de su reina.

Tensión en Winterfell

En el Norte la popularidad del Rey Jon está a la baja, al menos entre un par de vasallos y sus aliados del Valle. Sansa, para molestia de Arya no salta en defensa de su hermano y esto lleva a un choque entre ambas.

Lady Stark no puede evitarlo. Sus ansias de poder son evidentes. Si bien ama a su familia, está tentada por el poder. Y se cree mejor para detentarlo que Jon. No lo ha dicho pero lo ha dejado entrever. Quizás esté en lo cierto, al menos desde el punto de vista del día a día.

Arya, ahora una asesina excepcional, le reclama su actitud a Sansa y la brecha entre ambas empieza a reabrirse. Recordemos que nunca fueron en exceso unidas. Pese a ser hermanas sus diferencias son grandes. Hay mucha mala sangre entre ellas desde la ya lejana primera temporada. Si tenemos en cuenta que han pasado años sin verse, desde el punto de vista de la menor de las Stark, su hermana no ha cambiado.

Y eso le da armas a Littlefinger.

El gran manipulador ya fue puesto en su sitio por Bran, pero eso no quiere decir que ha sido vencido. Baelish le tiende una trampa a Arya y esta cae redonda. Pese a sus habilidades, la chica no tiene la astucia para ver más allá en el juego y eso seguro traerá problemas.

¿La carta que encontró Arya firmada por Sansa? Una nota que le hizo escribir Cersei para Robb y que la deja muy mal. Baelish estaba presente en ese momento y Robb, cuando la recibió, tuvo claro que su hermana era coaccionada.

Volviendo a Bran, el joven usa sus poderes para mandar un equipo de drones… digo, de cuervos, a una misión de reconocimiento más allá del muro. El Rey de la Noche marcha con su ejercito cerca de Eastwatch by the Sea, el último fuerte de El Muro ubicado junto al mar.

Un descubrimiento clave… que pasa bajo la mesa

De allí volvemos a la ciudad de los maestros, Oldtown, donde Samwell acumula frustraciones. Parece que será una escena sin trascendencia, pero Gilly nos da una pista que posiblemente tendrá mucho peso en el futuro.

En los registros de un antiguo maestro la chica lee que Rhaegar Targaryen anuló su matrimonio con Elia Martell para contraer luego una boda expresa con cierta mujer. Esa mujer es evidentemente Lyana Stark, lo que significa que Jon no solo no es un bastardo Stark, sino que es heredero al trono. Y por encima de Daenerys, su tía.

Pero Samwell no se detiene a escuchar a la chica y decide abandonar la ciudad con varios libros de la sección prohibida.

En paralelo, luego de recibir las noticias del Norte, en Dragonstone se planea una misión suicida. Hay que concertar una reunión con Cersei para unir fuerzas contra el ejercito de los muertos. Para ello, Tyrion viaja con Ser Davos a Kings Landing. Allí se reúne en secreto con Jaime mientras que Davos encuentra a Gendry.

Si, tras muchos años de remar el bastardo de Robert Baratheon y a todas luces el último miembro de esa familia con vida está de regreso. Además, nos enteramos que Cersei está una vez más embarazada de un hijo de Jaime. Si, desagradable… pero normal para ellos a estas alturas.

Lo que sigue es la acelerada formación de un “Dream Team”. El Rey en el Norte, Jon Snow se marcha al norte con Jorah Mormont y Gendry con su martillo de guerra. Allí recluta a Tormund con su hacha, el “Sabueso Sandor Clegane, Beric Dondarrion y Thoros de Myr con sus espadas ardientes y parte en una misión imposible. Deben capturar a un muerto y llevarlo al sur, para demostrarle a Cersei que la amenaza es real.

Si, el episodio de este domingo será épico.

 

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