Inicio General Perfiles y Homenajes Ese no es mi Luke Skywalker: El personaje más destrozado de The Last Jedi

Ese no es mi Luke Skywalker: El personaje más destrozado de The Last Jedi

25 minuto leer
3
0
Luke Skywalker

(Madrid, 23 de Diciembre. O’kuroku).- Antes del lanzamiento de The Last Jedi, hicieron mucho ruido las declaraciones de Mark Hamill, el actor que interpreta a Luke Skywalker. Inconforme por su rol de McGuffin en Episodio VII, Hamill esperaba -y recibió- un papel más relevante en el VIII. Sin embargo, difícilmente puede estar complacido.

Fue muy vocal con ello antes de las giras de promoción del film. Pero todo cambió una vez empezó la promoción formal de la película ¿Ahora? Quizás le hicieron firmar una clausula que le impida hablar por 10 años, porque si fuéramos él, estaríamos echando chispas. ¿Por qué? Las razones son muchas, y si bien Luke tuvo momentos brillantes en el film, en general fue subutilizado, su carácter cuestionado y su legado enlodado.

Conociendo a Luke: A New Hope

Luke Skywalker A New Hope
Skywalker como un joven inocente pero talentoso

Pero antes de hablar de lo que está mal con el Luke Skywalker de The Last Jedi, hablemos del arco del personaje. En general me limitaré a las películas de George Lucas, que son el canon principal, en especial ahora que el viejo Universo Expandido no es tal. No obstante mencionaré algunos elementos de su historia en lo que ahora es llamado Star Wars Legends.

El público general no suele estar al día con la infinidad de novelas, cómics, videojuegos y más que integran el viejo Universo Expandido, por ello dedicaré más espacio al arco que es familiar a todos. Cuando Luke Skywalker fue presentado en Star Wars en 1977, parecía ser un joven ordinario.

No obstante, tras su encuentro con R2-D2 y C3PO, busca a Ben Kenobi y se entera que no lo es. Skywalker es hijo de un antiguo caballero Jedi. De entrada nos dicen que si bien fue criado como un ser humano ordinario, tiene dotes para controlar La Fuerza. Ben, que revela que su nombre real es Obi-Wan Kenobi, maestro Jedi y antiguo general de la República durante las Guerras Clonicas, actua como el primer maestro del chico.

Con 19 años es muy mayor para iniciar el entrenamiento como Jedi, no obstante demuestra tener talento especial para hacer uso de sus poderes. Tras la muerte voluntaria de Obi-Wan a manos de Darth Vader, este se vuelve un fantasma de la Fuerza y así se comunica con el joven Skywalker. Un hábil piloto antes de ser consciente de sus habilidades en La Fuerza, el joven Skywalker es instrumental en la destrucción de la Estrella de la Muerte durante la Batalla de Yavin.

Su formación como Jedi: Empire Strikes Back

Luke Skywalker Empire
Bajo la tutela de Yoda, Skywalker empieza a ser un Jedi real

Tres años más tarde, Luke Skywalker es un comandante dentro de la Alianza Rebelde, con base secreta en Hoth. Si bien no ha tenido un maestro formal, ha seguido haciendo uso de su sable laser y se ha vuelto algo más hábil en el uso del arma Jedi. Tras el ataque de las tropas imperiales, por el que los rebeldes son obligados a huir, viaja a Dagobah por consejo del fantasma de Obi-Wan. Allí conoce al Maestro Yoda, quien le entrena por alrededor de un año.

Durante su entrenamiento sufre varios retrocesos. Primero su falta de confianza le impide sacar su X-Wing del pantano. También enfrenta una prueba en la que se ve forzado a enfrentar una alucinación con la forma de Darth Vader y al derrotarla ve su propio rostro bajo la mascara. Esta es la primera pista de que Vader es de hecho Anakin Skywalker, su padre.

Contra los consejos de Yoda, el aprendiz de Jedi decide ir a Cloud City antes del final del tercer año después de la Batalla de Yavin y es derrotado por Vader, quien le revela la verdad. Conmocionado huye, y salva la vida por su vinculo con Leia Organa, quien detecta donde está el aprendiz de Jedi.

Luke es un Jedi: Return of the Jedi

Luke Skywalker Return
Luke «completa» su entrenamiento en Episodio VI

Durante los siguientes meses Luke Skywalker sigue entrenando por su cuenta y organizando el rescate de Han Solo, quien ha sido trasladado por Boba Fett a Tatooine. Ya nos encontramos en el cuarto año después de la batalla de Yavin.

Con Han a salvo, vuelve con Yoda con la intención de completar su entrenamiento y comprobar si lo que le dijo Vader es cierto. Yoda, debilitado, no está en condiciones de entrenarlo pero confirma las palabras de Vader y, ayuda a que Luke reconozca en Leia a su hermana. Además, le aconseja de cara a su inevitable enfrentamiento con Vader. De cara a la batalla de Endor, Skywalker se entrega por voluntad propia a Darth Vader, quien le presenta ante el Emperador Palpatine (Darth Sidious).

Ante su negativa a rendirse ante el emperador, Luke y Vader son obligados a pelear. Al principio el Jedi se rehusa, pero al darse cuenta de que Leia es su hermana, Vader amenaza con ir por ella. Cegado por la furia, Skywalker enfrenta a su padre coqueteando con el Lado Oscuro de la Fuerza por un breve instante. Sin embargo, recupera el control de sus emociones y se niega a claudicar. Sus acciones hacen despertar a Vader, quien logra retornar al Lado Luminoso, y se sacrifica para matar al Emperador.

Tras la muerte de Vader, Luke traslada sus restos a la luna de Endor donde se celebra la victoria. Tras reencontrarse con Leia, quien también ha descubierto que son hermanos, hace un funeral para su padre y ve aparecer a los fantasmas de la fuerza de Obi-Wan, Yoda y el redimido Anakin Skywalker. Allí concluye su historia en la trilogía original.

Las «Legends» de Star Wars y el carácter de Luke Skywalker

Luke Skywalker Legends
En las no canon Legends, Luke se vuelve un Gran Maestro Jedi como Yoda

Luke Skywalker es descendiente de «EL ELEGIDO» y es un usuario poderoso de la fuerza. Como su padre, ante la amenaza a un ser querido se deja llevar por la ira. Pero su carácter, fundamentalmente bueno y mucho menos pretencioso que el de Anakin en la juventud, le lleva a resistir al Lado Oscuro. Con el final abierto, es difícil saber que hizo Skywalker en los años que siguieron a la Batalla de Endor.

Ahora hay una nueva serie de cómics y nóvelas que revelarán el nuevo canon, pero antes, teníamos al Universo Expandido. Hoy Legends.

El gigantesco cúmulo de historia de Legends nos cuenta la larga travesía que recorrió Luke tras Return of the Jedi, antes de ser un maestro Jedi. En una historia que cuenta años de aventuras, se siguió formando en las viejas enseñanzas de los Jedi… pero eso no le hizo inmune a caer al Lado Oscuro. La «resurrección» del Emperador Palpatine y su amenaza sobre su familia, le hizo «caer» y trabajar a sus ordenes.

Movido por el ego, Luke creía que podía fingir trabajar para el Emperador y luego derrotarle, pero falló. No obstante, antes de que su destino estuviera sellado, Leia le ayudó a volver y juntos frenaron a Palpatine. La experiencia le permitió conocer la otra cara de la moneda y tras fortalecer su espíritu, no solo se volvió el maestro de muchos aprendices de Jedi, sino que dominó la Tormenta de Fuerza, una técnica oscura… ahora luminosa.

Entre sus aprendices estuvieron sus sobrinos, Jacen y Jaina Solo. También el menor de los hijos de Leia y Han, Anakin. También entrenó a una antigua asesina imperial de la que se enamoró, Mara Jade, con quien tuvo su propio hijo, Ben Skywalker. Durante la cada vez más expansiva historia de Star Wars, el Luke de Legends enfrentó muchos retos y tuvo muchos fracasos, pero también victorias y estableció un legado para la Galaxia. Esto pese a que su familia también generó mucho dolor, con la caída de su sobrino Jacen al Lado Oscuro.

No obstante, siempre enfrentó sus errores y buscó la paz en la Galaxia ante todo tipo de amenazas. Incluso tras la muerte de sus sobrinos o de su esposa. Pero todo eso acabó en The Last Jedi.

La destrucción sistemática del pasado… y de Luke Skywalker

The Last Jedi puede resumirse en una frase de Kylo Ren o Ben Solo (una amalgama de Ben Skywalker y Jacen Solo), «Hay que dejar atrás el pasado incluso si tenemos que matarlo». Y a eso se dedica Rian Johnson, en especial en el caso de Luke.

Si bien estamos de acuerdo con la idea de pasar el testigo y así lo dije en mi critica de The Last Jedi, soy de la opinión que había formas menos ofensivas de hacerlo. Ahora vienen spoilers.

Para el Episodio VIII, se nos volvió a presentar a Luke como un hermitaño que se ha cerrado voluntariamente a la fuerza y se ha recluido en una isla de Ahch-To. Su vida es inconsecuente, no parece tener ninguna misión y luce un poco senil. Quizás es un eco de lo que pasó con Yoda al irse a Dagobah, con algunas diferencias. Primero es que en el Universo de Star Wars apenas si debería tener como mucho 54 años, pues estamos en el año 34 después de la batalla de Yavin. Además, Yoda nunca le negó entrenamiento, como él si hizo al principio con Rey.

Y es que desde la primera escena en que aparece empezamos mal. Su reacción al recibir el sable láser de su padre es tirarlo al mejor estilo de un sketch humorístico. La total carencia de trasfondo emocional está totalmente fuera de consonancia con el personaje que conocemos de sus tres films originales. Y ni hablar de lo leído por años en Legends, que para efectos de este análisis obviaré de ahora en adelante.

Luego de eso vemos al personaje aterrado ante el aparente coqueteo de Rey con el Lado Oscuro. También le vemos negado a ayudar a su hermana y a la Galaxia a salvarse. Acciones también fuera de orden con un personaje que no importa cuan «viejo» o decepcionado esté, jamás se rendiría tan fácilmente.

Parece que todo tiene explicación cuando nos cuentan el incidente llevó a Luke a su estado actual: Su confrontación con Kylo Ren.

Acá deliberadamente nos presentan a Luke como un personaje débil y asustado, que al ver el Lado Oscuro dentro de su sobrino lo primero que se le ocurre es ir a matarlo mientras duerme. Un comportamiento completamente ajeno con lo que vimos de él en sus tres films y más cercano a la actitud, también absurda de Anakin Skywalker en las vilipendiadas precuelas… en una escena preocupado porque un Jedi intente matar sin juicio a un Lord del Sith y en la otra matando a niños inocentes en un Templo.

¿Si criticamos eso del Anakin de George Lucas como no vamos a criticar al Luke de Rian Johnson? Más aun cuando no tenemos un contexto que justifique esa debilidad y ni siquiera le dieron tiempo suficiente en pantalla a Luke Skywalker como para entenderlo.

Luego con justifican esta pobre decisión diciendo que este instinto oscuro solo le duró un instante, pero que Kylo despertó y le malinterpretó. Que claro, eso bastó para que el entonces adolescente se volviera un homicida y matara a todos sus compañeros de aprendizaje. ¿Y que hace Luke en lugar de asumir sus errores como normalmente habría hecho el personaje? Pues se oculta, y deja que la Nueva República caiga sin defenderla… Al menos Yoda enfrentó a Palpatine una vez antes de exiliarse.

Así, el personaje de Skywalker pasa de ser un Caballero Jedi por derecho propio y salvador de la Galaxia junto a la Alianza Rebelde a un cobarde. Uno que ante el primer traspiés se oculta con el rabo entre las piernas y deja que su sobrino sirva como instrumento para destruir la obra de su vida.

Normal que Mark Hamill esté enojado. ¿Quien no lo estaría? Además, cuando al fin decide Rian Johnson que Luke debe ser útil, lo hace vía una proyección mental -una técnica Jedi avanzada-, negándole una confrontación real con su sobrino y para más Inri, luego deciden matarle. De una forma que sorprendió al propio Hamill.

Tanto que algunos fanáticos de las teorías conspiratorias piensan que ni él sabía que al final de The Last Jedi se volvería uno con la Fuerza. Igual que a Leia, a Luke le negaron un final épico. Ni siquiera pudo repetir la hazaña de su mentor y morir bajo la espada de su enemigo por decisión propia, antes de pasar a ser uno con La Fuerza.

Así, Luke es reducido a ser un fracaso, incapaz de restablecer a los Jedi. Incapaz de enseñar un solo aprendiz que continúe su legado. O dando por sentado que una niña sin entrenamiento alguno es una Jedi que «tiene todo lo que necesita». Skywalker es una caricatura de si mismo y no importa lo aparentemente épica que sea su escena de combate con Kylo, no deja de dejar un mal sabor de boca.

Star Wars ya no es una historia basada en los mitos originarios, en los héroes de mil caras, su historia y su futuro. Ahora el pasado muere, para dejar que el último Skywalker sea un villano malcriado a medio entrenar y la heroína sea una «Don Nadie Mary Sue» sin entrenamiento alguno. Y para lograr esto se sacrificó un cordero al Dios Ratón, Luke Skywalker.

Cargue Artículos Más Relacionados
Cargue Más Por Amilcar Trejo Mosquera
Cargue Más En Perfiles y Homenajes

Mira además

Rurouni Kenshin 2023 aprueba el examen, pero queda a deber: Reseña Final

Despedida de Kenshin y Kaoru Rurouni Kenshin 2023 …